Colombia cuenta con primera planta de combustible derivado de residuos
La transformación energética se ha convertido en uno de los asuntos de mayor interés en Colombia porque de ella se desprenden temas tan importantes como la sostenibilidad del país, la protección ambiental y el aseguramiento de la provisión de energía para hogares e industrias.
Por eso, el aprovechamiento de fuentes alternativas es fundamental de cara a alcanzar mejores niveles de desarrollo en el país. Aquí entra en juego la producción de CDR (Combustible Derivado de Residuos) para el aprovechamiento energético de los residuos, una tecnología de la que Atica, compañía líder en soluciones integrales para la gestión de residuos y aguas industriales, es pionera en Colombia desde hace más 5 años, siendo la única que ha implementado con éxito esta innovación.
Mauricio Abondano, gerente de negocios de Atica, explica que Combustible Derivado de Residuos “es una tecnología empleada para el aprovechamiento del poder calorífico de los residuos ordinarios, peligrosos y especiales en el proceso de incineración, reemplazando el uso de energías o combustibles convencionales”.
En pocas palabras, CDR Combustible Derivado de Residuos aprovecha el poder calorífico de los residuos para enérgicas eléctricas/térmicas y combustibles alternativos que son empleados en procesos industriales de Atica, reemplazando el uso convencional de gas e hidrocarburos.
Atica trató en 2019 un total de 14.825 toneladas en incineración en Colombia por cuenta de la tecnología CDR. Durante 2020 llevó 14.465 toneladas tratadas a sus hornos y CDR, y tiene actualmente una operación anual de 3.004 toneladas en todo el país.
“Contamos con 7 hornos de incineración en Colombia con capacidad para tratar 25.000 toneladas al año. De estos, 3 tienen tecnológica CDR y se encuentran en Bogotá y Cartagena. Próximamente estaremos inaugurando nuestro CDR en Cali para seguir empleando esta energía en procesos innovadores de Atica”, destaca Abondano.
La empresa cuenta, además, con equipos de última tecnología, únicos en Colombia, y una flota propia con más de 140 vehículos especializada en el transporte de residuos, además de 9 plantas operativas de alta capacidad para el aprovechamiento y tratamiento de residuos instaladas en Cartagena, Barranquilla, Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga y Pereira.
Ventajas ambientales y económicas
Entre otros beneficios, CDR Combustible Derivado de Residuos posibilita la producción de combustibles líquidos a la medida, sustitutos de ACPM, FUEL OIL, fondos de proceso y combustibles sólidos con alto poder calórico.
Por otra parte, y con miras a reducir los impactos medioambientales de los combustibles fósiles, la incineración con aprovechamiento energético CDR es un método de tratamiento que no genera pasivos ambientales y elimina el uso de rellenos y celdas de seguridad.
En línea con la sostenibilidad, los procesos de Combustible Derivado de Residuos están avalados mediante licencias ambientales.
“Esta tecnología nos permite el reemplazo en la utilización de combustibles fósiles como el gas natural y los hidrocarburos, ya que en los procesos se hace uso de residuos peligrosos, ordinarios y especiales para la generación de energía con el fin de usarla en procesos industriales de Atica”, destaca el gerente de negocios de la compañía.
CDR le permite a todo tipo de organizaciones mejorar sus indicadores ambientales y certificarse en sellos como BASURA CERO, Economía Circular o Cero uso de rellenos.
“La tecnología Combustibles Derivados de Residuos entrega eficiencia económica dentro de los procesos productivos de las compañías, con precios competitivos para nuestros clientes”, indica el gerente de negocios de Atica.
Finalmente, las organizaciones pueden acceder a certificación directa por parte de Atica gracias al aprovechamiento energético de residuos peligrosos, no peligrosos y especiales, que se convierte en un importante beneficio para sus clientes, ya que esta empresa no depende de terceros para la certificación ni para el aprovechamiento de residuos.
Una flota que se mueve con CDR
Atica también dio a conocer que circulará con 19 vehículos 100% eléctricos, catalogados como camiones eléctricos de 4 toneladas y camionetas tipo Van de una tonelada. Su uso permitirá reducir la emisión de cerca de 240 toneladas de dióxido de carbono por año, un impacto ambiental positivo que beneficiará a cerca de 500 clientes generadores de residuos en sus KPI ambientales de huella de carbono.
Estos nuevos vehículos de carrocería liviana modificada compensan el peso de las baterías que usan como fuente principal de energía y han sido diseñados con especificaciones de bajo peso y autonomía para operar en ciudades de tráfico denso como Bogotá y Medellín.
La empresa ha señalado que próximamente estará en capacidad de recargar las baterías de estos vehículos mediante la termodestrucción de los residuos que transporten. Gracias a CDR se genera vapor que puede ser transformado en electricidad a través de una turbina, añadiendo una etapa nunca vista en el ciclo de la economía circular de los residuos en Colombia, lo que convierte a Atica en la única empresa en el sector que posee una flota con dichas características.